Soja y maíz impulsan el mercado global de granos

El mercado internacional de granos atraviesa una etapa de alto dinamismo, con la soja y el maíz como protagonistas, según el último informe de BRS Dry Bulk. Los factores clave detrás de este movimiento incluyen una fuerte demanda desde China y una producción récord en Brasil, que están elevando los precios y el comercio internacional.

Soja: récord brasileño y demanda china al alza

La soja brasileña alcanzó en las últimas semanas sus precios más altos en 15 meses, gracias a la robusta demanda china para embarques en agosto y septiembre. La desaceleración en las ventas de los agricultores también influyó en el alza de las primas CFR hasta los 8 centavos por bushel.

China, el mayor comprador global de esta oleaginosa, elevó su consumo de soja brasileña un 37,4% interanual en mayo. A esto se suman las mejoras en los márgenes de molienda en el gigante asiático, que impulsaron nuevas reservas: solo en dos semanas se concretaron más de 35 cargamentos desde Sudamérica.

La producción mundial de soja alcanzará las 426,8 millones de toneladas métricas, con Brasil liderando con una cosecha récord de 169,6 millones. Las exportaciones globales crecerían un 3%, con un estimado de 188,4 millones de toneladas métricas.

Maíz: recuperación en primas de embarque en Brasil

El mercado brasileño de maíz también muestra señales positivas. A pesar de una demanda internacional moderada, las primas en puertos como Santos, Tubarão, Barcarena e Itaquí han repuntado. Este repunte se atribuye al inicio lento de la cosecha 2024-25 y a la apreciación del real frente al dólar, que desincentivó las ventas y restringió la oferta inmediata.

Según proyecciones, la producción mundial de maíz en 2025-26 alcanzará un récord de 1.266 millones de toneladas métricas, mientras que las exportaciones subirán a 195,8 millones. Sin embargo, se anticipa una reducción de 10 millones de toneladas en las existencias globales, reflejo de un mayor consumo.

Trigo: ajuste en compras y nuevas rutas de importación

El trigo también presenta movimientos relevantes. Egipto finalizó anticipadamente su campaña de adquisición local con solo 3,9 millones de toneladas, muy por debajo del objetivo de 5 millones, en medio de alta inflación y presión fiscal. Esto obligará al país a incrementar sus importaciones, especialmente desde Ucrania, aunque se verá afectado por el aumento del 15% en las tarifas de tránsito por el Mar Negro, impuestas por Turquía.

China también ha reforzado sus compras para compensar el daño climático a sus cultivos, destacando adquisiciones desde Australia (55.000 t) y Canadá (1,6 millones de t), esta última representando el 84% del total anual de 2024.

La producción mundial de trigo para 2025-26 se estima en 808,6 millones de toneladas, con buenos rendimientos en Rusia, la Unión Europea, Argentina y Canadá. En África subsahariana, las importaciones crecerían 7% debido al aumento de la demanda urbana.